
Con la explosión demográfica y la invasión de las nuevas tecnologías, Manhattan se ha convertido, desde mediados del siglo XIX, en el laboratorio de una nueva cultura, la de la congestión; una isla mítica dónde se hace realidad el inconsciente colectivo de un nuevo modo de vida metropolitano, una fábrica de lo artificial donde lo natural y lo real han dejado de existir.
OPINIÓN PERSONAL: Curiosamente, este libro lleno de pequeñas y grandes anécdotas, cuya lectura no me ha resultado precisamente fácil, me ha sorprendido por su grandiosidad, por la cantidad de variables que maneja a nivel humano y arquitectónico, y por cómo logra engancharte en algunos puntos y alejarte en otros.
Para todos los que tengais que proyectar algo, este es un libro que inspira a todos los niveles, ya que hace pensar en lo bueno y lo malo de la forma de vida actual y pasada, y en la forma de intervenir en la naturaleza y en lo creado por el hombre de cada una de las posibles personas que pudieran vivirlo.
Hace sentirse parte de un todo, y si conoceis Nueva York, reconocereis algunos de los rincones que habeis visitado y comprendereis del todo su magnificencia.
By: Azahar